Las afecciones relacionadas con el funcionamiento gastrointestinal todavía son consideradas un tema tabú por muchas de las personas que las padecen, a pesar lo molestas que pueden resultar. Puede que esto ocurra debido a una percepción escatológica de los síntomas.
Una de las afecciones gastrointestinales crónicas más sufridas por la población y que mejor representa el dato anterior es el síndrome del colon irritable. En este artículo hablaremos acerca de qué es el síndrome del colon irritable, sus síntomas, causas y posibles tratamientos.
Conocido también bajo los nombres de colon espástico, colitis mucosa y colitis espástica, el síndrome del colon irritable es un trastorno que afecta al intestino grueso y provoca en la persona una serie de síntomas y signos intestinales.
Los síntomas característicos del colon irritable implican calambres, dolor abdominal, hinchazón, gases y trastornos gástricos como estreñimiento y/o diarrea. Estos síntomas aparecen de manera crónica, por lo que los pacientes deberán controlarlos a largo plazo.
En principio, los síntomas de síndrome de colon irritable son molestos pero no graves. No obstante, existe un reducido número de casos en que los pacientes sí presentan una sintomatología más severa.
Por lo general el síndrome de colon irritable puede ser controlado mediante dieta y cambios en el estilo de vida y la manera de afrontar el estrés. Sin embargo, existen remedios no farmacológicos, como la Kijimea, de los cuales hablaremos al final del artículo.
En los casos de pacientes con síntomas graves, estos pueden ser tratados con medicación y asesoramiento médico y nutricional. También nos referiremos a estos procedimientos más adelante.
En cuanto a las causas del síndrome del colon irritable, no se encuentran todavía claras. Se hipotetiza que puede ser resultado de una combinación de problemas o alteraciones en el eje intestino-cerebro, trastornos de motilidad intestinal, sensibilidad al dolor, infecciones que provoquen un sobrecrecimiento bacteriano, factores genéticos y sensibilidad a los alimentos.
Se estima que entre un 10 y un 15% de la población mundial padece el síndrome de colon irritable. Esta afección es más común en países de América del Sur y afecta con mucha más incidencia a mujeres que a hombres, dándose casi el doble de casos en personas de sexo femenino.
Por suerte, el síndrome de colon irritable no afecta a la esperanza de vida de la persona ni es un factor de riesgo para la aparición de otras enfermedades graves.
Los síntomas propios del síndrome de colon irritable pueden variar entre las personas que lo padecen. No obstante, existen una serie de síntomas comunes que se experimentan en la mayoría de casos. El cuadro clínico del síndrome de colon irritable incluye:
Dolores abdominales, calambres o hinchazón que se alivian o desaparecen después de que el paciente haga sus necesidades.
Exceso y acumulación de gases.
Problemas gástricos como diarrea y/o estreñimiento que pueden aparecer en episodios alternos.
Mucosidad de las heces.
Esta sintomatología del colon irritable puede aparecer tanto de manera constante como en episodios entre los cuales mejoran o desaparecen por completo. Además estos síntomas pueden agravarse debido a una mala alimentación, estrés psicosocial y cambios hormonales.
Tal y como hemos dicho al inicio del artículo, las causas concretas del síndrome de colon irritable son todavía desconocidas.
No obstante las investigaciones sugieren la posibilidad de que existan una serie de factores que intervengan en la aparición de este trastorno.
Nuestros intestino se encuentran recubiertos por una serie de capas de tejido muscular que se contraen para desplazar a los alimentos a través del tracto digestivo.
Si estas contracciones son fuertes y duraderas pueden provocar gases, hinchazón y diarrea, todos ellos síntomas del síndrome de colon irritable.
El funcionamiento anormal de los nervios que controlan y regulan el funcionamiento del sistema digestivo puede causar incomodidades relacionadas con la acumulación de gases.
Cuando existe una mala coordinación entre el cerebro y los intestinos puede aparecer síntomas del colon irritable debido a una respuesta anormal del cuerpo a los cambios que se dan durante la digestión.
Existen un gran número de casos de pacientes son síndrome del colon irritable que poseen un mayor número de células del sistema inmune presentes en los intestinos.
Este aumento de la respuesta del sistema inmune puede provocar inflamación de los intestinos, así como dolor y diarrea.
Debido a la aparición de bacterias y virus, tras un episodio de diarrea intensa aumentan las posibilidades de desarrollar colon irritable.
La microflora intestinal está compuesta por una serie de bacterias beneficiosas para el organismo que favorecen la salud gastrointestinal.
Se hipotetiza que en el síndrome del colon irritable puede existir un desequilibrio en esta microflora.
Por el momento no existe una cura para el síndrome del colon irritable, por lo que el tratamiento se centra en aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente.
En los casos más leves, el síndrome de colon irritable puede controlarse mediante cambios en el estilo de vida y la dieta y practicando técnicas de manejo del estrés.
Habitualmente las recomendaciones para los pacientes de colon irritable incluyen:
Comer alimentos ricos en fibra
Beber mucho líquido
Hacer ejercicio de manera regular
Dormir lo suficiente
Eliminar las bebidas con gas
Disminuir el consumo de alimentos con gluten
Mediante la ayuda de un profesional del ámbito de la nutrición, el paciente podrá conseguir implementar en su vida los cambios necesarios para poder convivir de la mejor manera posible con el síndrome de colon irritable.
En función del tipo y la gravedad de los síntomas del síndrome de colon irritable, el profesional médico podrá recomendar una serie de medicamentos entre los que se incluyen:
Suplementos de fibra
Laxantes
Fármacos antidiarreicos
Fármacos anticolinérgicos para controlar los espasmos intestinales
Antidepresivos tricíclicos en los casos en los que aparezcan síntomas afectivos o emocionales
Antidepresivos inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS)
Medicamentos analgésicos como la gabapentina o la pregabalina
En base a la teoría de que la causa principal de colon irritable es una barrera intestinal deteriorada, han aparecido una serie de fármacos que tienen como misión remediar este deterioro.
Uno de los remedios más conocidos para el colon irritable es la Kijimea. El principal compuesto activo de la Kijimea es una cepa de bífidobacterias exclusivas que actúan adhiriéndose a la pared intestinal deteriorada.
Según los estudios, la Kijimea puede aliviar de forma significativa los síntomas del síndrome del colon irritable, al igual que mejorar la calidad de vida de los pacientes que lo padecen.
Chey, W. D., Kurlander, J. & Eswaran, S. (2015). Irritable bowel syndrome: a clinical review. JAMA, 313(9): 949–858.
Mayer, E. A. (2008). Clinical practice. Irritable bowel syndrome. New England Journal of Medicine, 358(16): 1692–1699.